Carlos Betancourt (Comandante Gerónimo)
Yo
estaba presente con Argelia Laya, Rafael Elino Martínez, Carmelo
Mendoza, Iván Daza, Cesar Augusto Ríos, yo me encontraba en ese momento
en el área de seguridad de la reunión, cuando se escucho la detonación,
corrimos hasta allí y el Comandante Argimiro estaba tumbado en el suelo
con un tiro en el bazo.
Fue un disparo accidental que se le escapo al
camarada Jesús Vetancourt llamado “Comandante Zapata” dirigente del
MIR, después que se le hicieron las curas de emergencia se le llevo al
Hospital mas cercano que estaba en El Tocuyo.
Las investigaciones que
se hicieron ahí arrojaron la conclusión firmada por “Cheche Cortes
quien era miembro del buro político del Partido Comunista, el era
miembro de la FLN y firmo el acta de defunción en la que se hacía
énfasis que era un accidente, surgieron muchas hipótesis de que lo
habían mandado a matar y esa versión no es válida porque fuimos
testigos.
Fíjate que Chucho que fue el responsable de esa muerte en
ese momento estaba sorprendido y desmoralizado y lloraba, a mi me ordena
la comandancia que lo desarme por la relación de confianza que yo tenía
con él y por ser camaradas del mismo partido.
Cuando lo desarmo sin
que el opusiera ninguna resistencia estaba bastante confundido sin dar
crédito a lo que había ocurrido, durante varias noches estuve al lado de
ese hombre protegiéndolo para evitar que tomara alguna acción suicida
por el remordimiento tan grande que tenía, luego fue enviado a China.
Ese
accidente fue fatal para nosotros por dos razones, primero porque el
camarada Argimiro Gabaldón era un verdadero comandante guerrillero,
combatiente muy querido por la gente, de verdad los campesinos querían y
admiraban mucho a “Chimiro”. En lo personal, yo sentía un gran respeto
por él por varias razones, a pesar que yo era militante del MIR y el era
del PCV, la actitud de Argimiro en esa época era algo muy particular,
porque donde nos encontrábamos en esos momentos era una de las pocas
zonas de Venezuela donde se daba la unidad concreta entre ambos partidos
Pavel Rondón (Comandante Torcuato)
Nos
encontrábamos en El Hato, la Comandancia General del Frente “Simón
Bolívar” estábamos sentados en círculo, en una discusión
político-militar muy especial, había un árbol en el centro y a mi
derecha estaba Betancourt manipulando un M-2, un momento que Argimiro se
puso de píe, estaba repartiendo caramelos, Vetancourt, puso el fusil,
él no le disparo yo vi cuando él lo puso entre sus piernas y se le
disparo la bala y le dio de frente y tuvo un recorrido por varios
órganos vitales y salió por la parte de arriba de la espalda.
Eso fue
al mediodía del 13 de Diciembre de 1964. En ese momento corrí hasta
casa de Benigna a buscar alcohol, no había y le pusimos limón, le
pusimos anticoagulantes, recurrimos a todas las medidas de emergencia,
vista las circunstancias se preparo inmediatamente su traslado, buscamos
la camioneta “Willie” de Rafael García, el nos la presto, bajamos en
hombres al Comandante, nos llevamos a Carmelo Mendoza, Argimiro fue
rasurado mientras se le hacían los primeros auxilios, la camioneta se
accidento varias veces y tuvimos que empujarla.
Pasamos la alcabala
frente a la bifurcación de El Molino, Carmelo iba manejando y el cabo de
guardia le hizo señas para que siguiera, Argimiro se le estaban
durmiendo las manos, no había duda de que era falta de sangre, llegamos a
la casa de Ramulfo Peralta y buscamos a los médicos que teníamos entre
los que estaban Félix Palencia y Valenzuela, pero había una corrida de
toros en Valencia y ellos estaban allá.
Recorrimos todo el pueblo la esposa de Valenzuela, hermana de Olguita y con René fuimos a buscar sangre.
Yuvirí
estaba en la puerta con el novio avisándonos porque muy cerca estaba la
casa del Prefecto y puso la música de un mosaico de la Billo Caracas a
todo volumen para que no se oyeran los quejidos de Argimiro que estaba
muy mal y la sangre le salía profusamente. Conseguimos todos los
recursos, pero no había medico para intervenir y optamos por llevarlo al
hospital, era ya de noche.
Carmelo y yo esperamos que llegara un camillero, cuando vimos que lo entraron al hospital, nos dividimos.
Yo
agarre una bicicleta de la farmacia que esta en La Lisandro Alvarado y
fui a casa de los De Paz. Reconozco la solidaridad en El Tocuyo, no
abstante la brutal represión que había en la zona por el Teatro de
Operaciones.
Yo estaba al lado de Vetancourt, yo si reconozco que el
era un indisciplinado, no cumplia con las técnicas, yo siempre le decía
que el arma no se podía tener cargada todo el tiempo porque es un
riesgo, el siempre cargaba el arma montada, hay cosas que se han
conocido a posteriori, pero yo no tengo ningún elemento para decir que
fue intencional lo del tiro, si hubiese habido alguna duda de parte de
nosotros se le hubiera sometido a un juicio pero no la hubo, esos
cuentos posteriori son muy difíciles de creer.
Habla Félix Palencia el médico de la Fal
Ese
día estaba yo efectivamente en una corrida de toros en Valencia, llegue
a El Tocuyo como a las 12 de la noche y me entere que habían traído a
Argimiro herido a eso de las 7 pm, la idea era que lo llevaran a mi casa
donde yo tenia el consultorio.
Lo trajo Carmelo Mendoza (Un experto
en explosivos que venía del Vietnam) junto a Pavel Rondón, la Sra.
Benigna, pero en vista de la gravedad del caso y yo no encontrarme lo
llevaron al Hospital y ahí gritaron – aquí dejamos un herido – y se
fueron corriendo.
Cuando yo llegue de Valencia Argimiro ya estaba
muerto, yo fui al hospital al día siguiente, nadie sabía quién era el
muerto, el que lo reconoció fue el Dr. Alirio Giménez, cuando se supo
que era Argimiro apareció toda la Inteligencia Militar y rodearon todo
eso.
Lo cierto es que la gente de la guerrilla perdió mucho tiempo
con Argimiro, se volvieron locos y tardaron mucho tiempo, si lo hubieran
traído con tiempo aquí y de aquí a Barquisimeto se hubiera salvado,
pero duraron casi 8 horas para que se le pudiera prestar auxilio, los
del DIM se lo llevaron a Barquisimeto y le hicieron la autopsia. Por
cierto en el Hospital de El Tocuyo hasta le robaron el reloj de
Argimiro.
José Díaz (El Gavilán)
El hijo
mío fue el que vino a traer a Argimiro al Hospital de El Tocuyo, para
mi, José Díaz, lo mato un gran amigo, un tiro accidental y las razones
¿Cuáles son? Nosotros teníamos establecido que ningún guerrillero podía
cargar balas en la recamara, salvo en horas de combate, pero en
caminatas o desplazamientos no, una caída, una imprudencia, un susto,
peligra la organización, no se podía hacer eso.
En ninguna reunión se
podía tener proyectiles en la recamara porque si se presenta una
discusión acalorada pudiese haber un muerto.
En esa casa donde se
reunieron, Gabaldón no se podía sentar alto porque era operado de
hemorroides y el se sentaba bajito y cruzaba las piernas.
Zapata que
es el autor del tiro, ellos se conocían de muchos años y fueron grandes
amigos, pero Zapata estaba dando demostraciones de que no era un hombre
leal, otro error de las guerrillas, nosotros habíamos denunciado a este
hombre que pregunta tanto, éste es un hombre que quiere saber todo,
caramba. ¿Por qué?
El era primo hermano de uno de los jefes del
Comando Anti-guerrillero de El Tocuyo, (TO-3) Camilo Vetancourt, según
Pablo Medina que estaba recién bajado de los Humocaros, se encontraba en
Barquisimeto, dijo que Chucho es sospechoso porque el se había reunido
dos veces con el Jefe de la 3ra. División sin informar a la Comandancia
Guerrillera.
Comenta Pablo Medina que la muerte de Argimiro es
inscribe en todas las muertes que han ocurrido en América Latina, era
una leyenda, un hombre de nombradía popular, era un hombre peligroso
para el sistema.
Habla el Comandante Douglas Bravo
Nosotros
en la FALN hicimos un esfuerzo para saber lo que realmente le sucedió a
Argimiro, entrevistamos a muchos compañeros que estuvieron allí, parte
de los hombres que lo conocieron a él y anduvieron con él, como Tirso
Meléndez, Freddy Carques, mas un grupo de la guerrilla que en el momento
de la división del PCV, cuando los expulsan se vienen del Simón Bolívar
para nosotros, para la FALN y es cuando se funda el PRV.
La
tendencia es un hecho casual, provocado por la limpieza de un M-2 al
lado de Argimiro y que los dos estaban sentados en un árbol y al
disparársele el arma le da por un costado, que no le toco el corazón,
pero si tuvo un gran derramamiento de sangre que es lo que le provoca la
muerte.
Surge la interpretación que algo pudo haber ocurrido porque
no es posible limpiar un M-2 con el proyectil en la recamara, cuando lo
primero que se hace es sacarle la cacerina y el proyectil que está en la
recamara.
Como ves, nosotros no pudimos tener una versión exacta, rigurosa sino dos interpretaciones.
Teníamos
preparada una reunión para dentro de pocos días donde iban a estar
Luben, Lunar Márquez, el flaco Prada, Fabricio Ojeda y Yo, hombres que
después fundarían el PRV, Argimiro ya era uno de los fundadores de ese
pensamiento junto a Fabricio.
Argimiro venía de militar en el Partido
Comunista y era un intelectual revolucionario, un poeta un hombre de
pensamiento elevado y es uno de los primeros que entra en contradicción
con la dirección del PC que frenó y paralizo la guerra, al igual que
hacia nosotros, hacia Argimiro había una gran desconfianza de parte del
PC. Argimiro había dado muchos aportes y él había sido marginado en el
PCV aunque no expulsado.
Antes de morir Argimiro se había planteado
la polémica en el PCV, por eso propusimos una reunión en Lara, yo salía
de Falcón y la gente del Llano y de Caracas nos íbamos a encontrar en el
“Frente Simón Bolívar”.
Habla Jesús María Rodríguez
Ellos
tenían una reunión en Los Bucares de la Yerbabuena en El Hato, cuando
yo llego Argimiro se alegra porque yo era su hombre de confianza en el
pueblo, en ese momento está Zapata conversando por allí, le llegan y le
entregan el M-2 que él se lo había prestado a una comisión que salió y
necesitaban un arma y entonces él le había prestado su arma, en ese
momento se lo devolvieron, él le saca la cacerina, lo pone en una
piedrita y se pone a limpiar el fusil.
Estábamos unos pa´lla y pa¨ca
porque habían parado la reunión, Argimiro viene a saludarme, me saluda y
va pasando detrás mío y suena un disparo, el carajo estaba limpiando el
arma y se le fue un tiro, cae Argimiro a los pies míos, pero por detrás
y en eso dicen – Revisen a ver donde fue la vaina – entonces se
enderezo, él se puso pálido – aquí es la vaina – dijo – en el suéter –
donde le entro el plomo por este lado y le salió por un lado de la
columna, yo me miraba por todos lados porque yo creía que me habían
perforado a mi también, salimos a buscar un carro a mi me mandaron al
Almorzadero, pa¨la carretera.
Eso fue al mediodía y a el lo sacaron en la tarde, en la mañana del día siguiente se oye la noticia.
Eso para nosotros fue como si se hubiera acabado el mundo. Eso fue muy bravo.